lunes, 4 de julio de 2011

4.

-Javier, tú necesitas a alguien que te entienda mejor, a alguien de tu edad… a alguien que pueda darte un futuro de verdad.
-Y que mi futuro lo quiera junto a ti no importa una mierda, ¿no?
No me responsabilices, Carlota. No vayas de víctima. Sabes de sobra que lo que acabas de decir es mentira, y si lo has dicho, lo has dicho para no sentirte culpable.
Mira, si lo que de verdad sientes es que esto no tiene futuro, vale; pero no intentes decirme que yo necesito esto y lo otro porque no es cierto y lo sabes. Nunca te he dicho que necesite otra cosa que no seas tú.
-Yo...
-No pienso enfadarme, no quiero, porque eres demasiado buena y viendo cómo está Julia, echando de menos algo que nunca ha tenido, también te entiendo a ti.
Si es lo que quieres, me parece bien y lo respetaré; pero no digas que lo haces porque yo necesito otra cosa o a otra persona, porque no es cierto.
-…
-Di algo, por favor. Tus silencios me matan.
-No sé qué decirte… Mira, te quiero muchísimo, más que a mi propia vida, joder, lo sabes de sobra; pero no creo que sea yo lo que necesitas, aunque tú insistas en lo contrario…
-¿Y ya está? Después de todo lo que hemos pasado me dices esa frase y ya está. Seremos amigos por lo menos, ¿no?
-Javi, por Dios, no te pongas así, no es una decisión, no es una bronca..
-¿Qué no me ponga cómo, Carlota? ¿Es para ponerse de otra manera? Tú misma acabas de decir que esto no tiene futuro…
-¡Me siento insignificante para ti! Tienes a tu lado a Julia o a cualquier otra mujer que podrían darte cosas que yo no puedo; ¿te das cuenta? Podrías tener un feliz matrimonio, una familia, un trabajo estable como escritor en cualquier sitio de buena fama y no estar correteando como un chiquillo para ver cuándo me encuentras o cuándo te busco.
-Me parece que estás diciendo la mayor gilipollez del mundo. La mayor gilipollez del mundo por no sentirte culpable.
-No es una gilipollez.
-Sí que lo es, sabes perfectamente que lo único que necesito en mi vida eres .





Nunca seré lo suficientemente buena para ti.

4 comentarios:

  1. Las caperucitas siempre infavalorandose. Algún día se darán cuenta de lo maravillosa que son.

    ResponderEliminar
  2. La gente no debe de infravalorarse, aunque creamos que no podemos darlo todo, que nunca seremos lo suficiente para el otro, si este nos quiere y nos necesita a su lado, de alguna manera, si que somos necesarios/as en su vida.

    Una muy buena entrada.

    Crêpes
    rellenos de
    Nutella.

    ResponderEliminar
  3. Que entrada más genial, ay esa sensación tan asquerosa de creer que no se es suficiente, de como alguien como él se ha podido fijar en alguien como tú, que en cuanto se de cuenta se irá... Menudo asco, si él ha dicho que la necesita que se lo crea :)

    ResponderEliminar
  4. Bueno, lo primero felicitarte por el excelente blog que tienes. Me encanta! Te sigo, sin dudarlo un momento. Yo también tengo un blog y me haria mucha ilusion que te pasaras y me siguieras...!
    ¡¡¡¡Te espero.!!!
    Besitos!!
    http://comopezenelaguajuntoati.blogspot.com

    ResponderEliminar

Toc, toc... ¿Hay alguien en casa?